CORDONES. La terminación de la parte lateral del empedrado, con cordones de cemento, habla de la mala calidad de la obra.
La tan mentada y promocionada nueva obra de conectividad entre el parque Lagorã y la calle General Roa de la ciudad de Caacupé ya está empezando a deteriorarse y eso que aún no se inauguró. La deficiencia en la construcción del empedrado ya se nota a simple vista. En una lluvia grande, el raudal podría arrastrar las piedras y los cordones de cemento al curso del arroyo Yhcaroysa.

“Estamos trabajando en la construcción del tramo de empedrado que unirá el Parque Lagorã con la calle General Roa, un paso más para seguir potenciando la conectividad en este lugar emblemático de nuestra ciudad”, posteó en su cuenta del Facebook el pasado 7 de febrero, el intendente municipal, Diego Riveros (PLRA), haciendo alarde de la obra que estaba en plena ejecución.

Sin embargo, aún no termina el mes de febrero y la obra vial ya presenta serias deficiencias, lo que indica la ejecución del pavimento pétreo fue en forma precaria y tiende a no durar mucho tiempo. Lo peor es que la ciudadanía no es informada sobre el costo de este tipo de obra, que tiene 100 metros aproximadamente, ni la empresa adjudicada para el trabajo.

La mala calidad de la obra hace que hasta dificulte transitar sobre el nuevo empedrado y antes que representar un avance se convierte en una obra que requerirá muy pronto de reparación lo que llevaría a una nueva inversión del dinero de los contribuyentes. Las gráficas hablan por sí solas de la deficiente obra que la municipalidad ejecutó apenas hace un mes, en la referida zona.
